Un jardín pequeño podemos hacerlo más grande y frondoso colocando cestos y macetas colgantes, aunque primero debemos estudiar su emplazamiento para que su riego y labores de mantenimiento no se conviertan en una tortura.
Un cesto proporciona una nota de color a la fachada principal de la casa.
Lantanas rastreras de color malva quedan perfectamente en un cesto colgante.
Fucsias colgantes bajo la suave sombra del cañizo que cubre parte de la pérgola.
Un cestillo pequeño con claveles blancos.
Un pequeño cesto con hedera helix cuelga de la pared de la fachada de la casa
Claveles en un cesto de fibra de coco, verbenas rosa en un cuenco de barro... ambos suspendidos de las ramas de una magnolia grandiflora.
Petunias enanas en una pérgola cubierta por una Wisteria Sinensis en flor
Unos cestos colgantes con verbenas, pensamientos y hedera helix ayudan a embellecer el balcón de madera y le dan un encanto especial.
hola diario de mi jardin que bello . es entretenido y la musica alucinante te felicito ademas lindo tu jardin espero que continues asi,relajada y con el jardin floreciendo todo el año y tus lindos dibujos las fotografias estan super lindas a ver si me animo a rehacer mi jardin gracias una admiradora de tu blog Erika
ResponderEliminarPues no lo dudes y anímate a rehacerlo!
ResponderEliminarUn saludo